Pese a estar en sus treinta, haber formado una familia y trabajar por excelentes salarios, cuatro amigos disfrutan del carrete de forma desenfrenada. El segundo libro de Fernando Cruz aborda la transgresión, la falta de empatía y la inequidad existente en la sociedad chilena.
El sociólogo penquista Fernando Cruz nos introduce en un mundo que a muchos puede parecernos cercano. El carrete, las conversaciones triviales entre amigos, pero también el doble estándar: nos mostramos de una forma en la cotidianidad, pero somos muy distintos en otros círculos. En su novela Caña Moral, un grupo de amigos conversan en la calle luego de haber consumido éxtasis y marihuana. Deberían estar en una fiesta electrónica, pero no están: uno de ellos fue ingresado a la urgencia de una clínica y su estado es incierto.
Mientras el resto del grupo especula sobre el destino de su amigo, conocemos su lado más íntimo, su real forma de ser y vemos cómo evitan, ante todo, la responsabilidad. Están en sus treinta, tienen trabajos muy bien pagados, han construido sus familias y no les falta nada material. Pero eso no es suficiente. «Quieren unas horas de olvido. Quieren transgredir y regresar, inmaculados, a sus vidas normales. Puede salir mal pero no importa: nada va a pasar. Otros asumen las consecuencias», explica el autor de Caña Moral.
Este jueves 3 de diciembre, a las 20:00 horas, vía Facebook Live , Ediciones Filacteria lanza la segunda novela del sociólogo Fernando Cruz que en 2015 publicó Alabama, su primera obra. En el encuentro participarán los escritores Alberto Fuguet, autor de libros como Mala Onda y Tinta Roja; y Macarena Araya, autora de Paisajes (No habrá muerte. Acá terminará el cuento) y académica de la Universidad Diego Portales.
A través de sus personajes Infante, Schmidt, Bianchi, Valdés y el propio narrador, el escritor entretiene y nos lleva a identificar muchas de las características y vivencias que relata en el libro en algún punto de nuestra vida. Caña Moral invita a la reflexión, evidenciando las contradicciones de ciertos círculos, los prejuicios, los desbandes y los pesares que experimentamos, incluso, teniéndolo todo.
«Muchos hemos vivido cañas morales. Algunos las experimentamos sin dañar a nadie, pero otros pueden llegar a afectar a los demás sin hacerse cargo de sus consecuencias. Esta es una novela de ficción, pero que nos pone en un escenario que bien podría ser real», comenta Fernando Cruz.