Pocos días atrás, Japón anunció que reclutaría a un grupo de poderosas empresas como Uber, Airbus, Boeing, con la idea de convertirse en el primer país en desarrollar autos voladores. Una verdadera revolución en el mercado automotriz. Por otro lado, una pequeña compañía israelí dedicada a fabricar máquinas para hacer bebidas gaseosas caseras fue comprada por la gigante Pepsi en más de 3.200 millones de dólares. Ciencia, innovación, tecnología y economía puestas al servicio de mejorar la calidad de vida de las personas.
No hay dudas acerca del nivel superior de naciones como Japón o Israel en cuanto a la investigación y el desarrollo tecnológico. Japón es uno de los países del mundo con mayor inversión en ciencia y tecnología, que cuenta con políticas públicas destinadas al fomento de la innovación y un gran número de investigadores que aportan con sus conocimientos al desarrollo. Factores comunes que comparte la nación hebrea, lo que les ha permitido posicionarse como grandes potencias exportadoras de tecnología a nivel mundial.
Todos estos conceptos asociados son la base de Laboratorios Naturales para Chile. Ciencia e innovación con ventaja, un interesante libro publicado por Ediciones UC con el apoyo de Clapes UC, que busca reflexionar sobre una fórmula que ha llevado a naciones como Finlandia o Nueva Zelandia a brillar en áreas que nacen de una identificación y explotación de condiciones «naturales» particulares que cada una de ellas posee.
El libro plantea la necesidad de aprovechar estas condiciones como un medio de suplir la brecha en inversión que realizan las grandes potencias, desarrollando los potenciales naturales que tenemos en Chile y que pueden ponernos en una posición relevante en la ciencia mundial.
Editado por el investigador y académico de la Pontifica Universidad Católica de Chile, José Miguel Aguilera Radic, y el actual Ministro de Hacienda, Felipe Larraín Bascuñán, el libro propone el concepto de «Laboratorio Natural», tomando como claro ejemplo el desarrollo astronómico chileno de las últimas décadas, la forma en que se logró aprovechar las condiciones naturales de nuestros cielos para la observación e investigación de un área de gran interés para la ciencia mundial, consiguiendo atraer inversión, tecnología de punta, conocimientos, que hoy benefician a nuestro país, poniéndonos en un lugar de avanzada en este campo, permitiéndonos aumentar la formación de nuevos profesionales en el área, fomentando el estudio e investigación de un modo inédito para nuestro medio.
El libro identifica potenciales laboratorios naturales de interés científico mundial como el estudio del poblamiento de América, el uso de la energía solar, el desarrollo de megaciudades, el estudio de la biodiversidad, los efectos del cambio climático, la ciencia polar/subantártica, entre otros.
Es interesante constatar cómo se desarrolló la visión de aprovechar las condiciones naturales de nuestros cielos para observar desde aquí el universo. Desde la idea del mismísimo Bernardo O’Higgins de crear un observatorio astronómico nacional, pasando por distintas expediciones y misiones de estudiosos que fueron aportando durante más de un siglo hasta lograr concretarla.
¿Pensaría que nuestros desastres naturales puedan terminar convirtiéndose en una ventaja comparativa frente a otras naciones? Sin duda lo es. Nuestro constante ir y venir con respecto a las catástrofes naturales nos permite tener una clara ventaja en la observación de distintos procesos y acumular una serie de datos de gran interés y utilidad para la comunidad científica internacional. Las lecciones dejadas por los más de ochenta terremotos superiores a 7 grados ocurridos en un siglo, además de erupciones volcánicas y desastres naturales varios, convierten a nuestro país, según uno de los textos que componen el libro, en uno de los laboratorios de resiliencia más sobresalientes del mundo. Nuestra experiencia ante tales embates de la naturaleza nos ha llevado a buscar formas para sobreponernos exitosamente a ellas, fortaleciéndonos como nación, generando oportunidades económicas a través del desarrollo de tecnologías tanto de estudio como de prevención, asistencia o preparación para los daños y por qué no, de productos para consumidores que demandan soluciones derivadas de la necesidad de protegerse o enfrentarlas de mejor forma.
Este es quizás uno de los ejemplos más interesantes del libro, pensar que todos esos grandes y dramáticos eventos, finalmente se han convertido en experiencia acumulada que nos ayudan a comprender mejor nuestro entorno y a prepararnos y ayudar a otros, para responder a tiempo ante los imponderables de la naturaleza. Muestra de ello es la ONG Topos y sus equipos de búsqueda y rescate de personas, los que han viajado a países como Haití y México para prestar su apoyo tras devastadores terremotos.
Laboratorios Naturales para Chile, muestra cómo la riqueza geográfica de nuestro territorio y su incomparable extensión, permite contar con variados polos de estudio y explotación, desde las condiciones privilegiadas para el uso de energías renovables asociadas a la producción de energía solar y geotérmica en el extremo norte, hasta la austral ciudad de Punta Arenas, convertida hoy en la capital mundial de la investigación Antártica, y la importancia que estas investigaciones revisten para la humanidad.
Tal vez aún estemos muy lejos de alcanzar las grandes inversiones que hacen los países más desarrollados en ciencia, tecnología en innovación, pero ya comienzan a circular por las más prestigiosas revistas científicas, asombrosos hallazgos realizados por compatriotas, también productos diseñados y desarrollados localmente, los que podrían convertirse en importantes contribuciones para enfrentar los desafíos de un nuevo siglo.
Con numerosas referencias bibliográficas, datos estadísticos, coloridos gráficos y fotografías, cada uno de los siete capítulos, se transforma en una lectura obligada para científicos, investigadores, académicos, profesores de ciencias y cualquier lector que quiera acercarse al conocimiento de nuestro país, la labor de nuestros científicos, la importancia de nuestros descubrimientos, y junto a ello despertar la motivación de nuevas generaciones de chilenos conscientes de la importancia y cuidado de nuestro territorio.
Laboratorios Naturales para Chile. Ciencia e innovación con ventaja está disponible en la web de la editorial, www.ediciones.uc.cl, en Librerías UC y en las grandes cadenas de librerías del país.
