Para la escritora de Sadcore este libro es para todos los que están medios rotos. Es su primer trabajo y cuenta con 18 cuentos donde se ve reflejado diferentes situaciones que plasman inquietudes. Nos cuenta como fue haber participado en talleres literarios y de cómo se fue dando a la hora de ser editada bajo Santiago- Ander.
—Cuéntanos un poco sobre ti
—Soy técnico en sonido y estudiante de producción musical actualmente. Toco el piano y teclados, un poco de guitarra y la nada de bajo. Escribo desde los 15 años y ya he perdido la cuenta de cuántos cuadernos y documentos tengo llenos. Soy virgo, vivo con mi familia y tengo un perro y una gata.
—¿Cómo fue participar en talleres literarios?
—Participar en talleres literarios fue algo que me cambió la perspectiva de escribir de manera radical. Estructurar los textos es muy importante. Además del concepto de “mostrar en vez de contar” que ha sido lo que he intentado plasmar en mis escritos. Han sido experiencias enriquecedoras, y realmente amo a los talleristas que me han enseñado. María José Viera-Gallo y Rafael Gumucio, principalmente.
—Sadcore es tu primer libro, ¿cómo fue para ti el proceso que tuvo este trabajo desde el inicio hasta el día de hoy?
—Fue largo y duro. Los cuentos son muy honestos desde mi propia perspectiva, incluso brutalmente sinceros. Ha sido un proceso definitivamente de catarsis. De purgar mis demonios y poder leer todo lo que escribí sin pudor, estoy realmente orgullosa del libro.
¿Qué es lo que más te gusta de Sadcore?
—Lo que más me gusta de Sadcore es la idea de que pueden ser varias protagonistas o solo una. La idea de cómo un personaje complejo va a reaccionar a distintas situaciones. Me parece interesante ese concepto.
—¿Cuál es el mensaje que quisiste dejar plasmado en este libro?
—Supongo que lo más importante para mí es visibilizar todos estos problemas con los que gente de mi edad pueda identificarse. Ya sea alguna enfermedad mental, un trastorno, ansiedad, historias de abuso. Es un libro para todos los que estamos medios rotos, me parece importante mostrarse vulnerable para obtener una reacción más bien visceral.
—¿Qué fue lo más importante a la hora de escribir tu obra?
—Tiempo. Tiempo para madurar los cuentos. Tiempo para mí misma para poder estar en el estado mental de poder escribir cuentos como los que están en Sadcore. También la constancia de escribir. Hay varios cuentos que no están en este libro, porque no cabían en el concepto, pero el hábito de escribir constantemente es muy importante.
—¿Cómo llegaste a Santiago–Ander Editorial?
Fue gracioso, porque del taller con María José, logré publicar un cuento en Saposcat. Supongo que Santiago-Ander leyó ese cuento y me contactaron para agregarlo en su nueva versión de Santiago en el Ojo. Me preguntaron si tenía más cuentos, y me emocioné y mandé como cinco. Me preguntaron si tenía algún plan para publicar un libro. Les dije que no tenía ningún plan, pero que me encantaría. Así, me junté con el editor y comenzamos el proceso.
—Si tuvieras la oportunidad de conversar con alguien y tomarse un café, ¿con quién sería y por qué?
—Fiona Apple. Su música me ha acompañado desde mi adolescencia y me continúa acompañando ahora que tengo 25. Me encantaría conversar con ella sobre el mundo y sobre música y libros e inspiraciones. Creo que es una persona muy auténtica y la admiro mucho.
—¿Dónde podemos encontrar Sadcore?
En www.santiagoander.cl Qué Leo Tobalaba, Qué Leo Forestal, Qué Leo Dublé Almeyda, Librería Kalimera, Librería del GAM, , Librería Nueva Altamira, Librería Secreta IG, Librería Gatos Ilustres IG Viña y Librería Los Perros Románticos.