Por Catalina Gatica
Te vi partir al espacio dejándome con la soledad que habita cada parte de mi alma.
Comencé a verte en todos lados, todos hablaban de ti y de cómo eras. Nunca te conocieron, solo comentaban lo que se decía en la base de aterrizaje.
«Era una persona»
«Era quién nos enseñaba el espacio»
«Pasará a la historia con esta hazaña»
«Es a quien todos admiran»
Todo retumbaba en mí porque no eras solo eso y no lo veían. Te fui conociendo desde que llegaste aquí, cinco años han pasado y aprendí de cada lugar que visitaste. Eras un ser humano, una persona como llamamos en Sintra.
Crecí creyendo que encontrarías en nosotros lo suficiente para quedarte, pero no fue así. Huiste al principio de nuestra Cuarta Luna desatando el caos del que siempre te hablé. Espero que el llamado de la tierra- que dices haber recibido- te mantenga ocupado lo suficiente para no detenerte a mirar el espacio que creaste en la galaxia con nuestra destrucción.