por Rodrigo Verdugo (Chile)
La poesía dentro de sus posibles definiciones ha sido catalogada como un «pensar en imágenes». Esta definición no obstante se vuelve muy operativa al adentrarnos en la lectura de Relámpago de sed, reciente obra del joven y talentoso poeta mexicano Alejandro Rejón Huchin.
Como todo poeta que se ha formado bajo el influjo de las vanguardias (y en alguna menor medida de la literatura barroca americana), hay una distancia necesaria respecto de la descripción impresionista, la mayoría de las imágenes aquí presentes tienen valor metafísico, diríase que el poeta esta por voluntad propia adscrito a una verdadera fenomenología de la imaginación:
«Donde la boca del alba siembra tus labios
El agua corre hasta el caudal del sueño»
La imagen alterna de manera simultánea diversos símbolos y signos, apelando a un sincretismo implícito:
«Y hemos sido un espejo
Que sangra al fondo de la carne»
La experiencia es transformada mediante un impulso inconsciente, de esta forma el poeta, evoca, rememora, aunque en forma fragmentaria, pero siempre con una intensa proyección metonímica, diríase que no es la búsqueda de la imagen por la imagen, es el asedio al ser de la imagen.
«Y se connotan las imágenes como fulgor
De otro lago que mece las aguas
Al otro lado del tiempo»
Explorando secuencialmente aquella ambigüedad referencial (tan propia de la poesía), el poeta Alejandro Rejón organiza sus imágenes en torno a un mensaje doblemente configurado, tal si quisiera adentrarse en los misterios filosóficos del inconsciente, de esta forman surgen en forma exuberante, armónicas correlaciones, correlaciones homológicas, conexiones unilaterales, que buscan romper con los hábitos de una percepción inmanente, apelando a una intersubjetividad trascendente.
«Encontramos la carne alucinando en lo mortuorio
Como cenizas que se funden con la memoria»
«Como todas las lecturas de barro
Que transporta nuestra carne»
No obstante, también podemos señalar que muchas de estas imágenes se originan a partir de un estado presimbólico, o bajo las determinaciones de una conciencia soñadora. Siguiendo siempre el impulso del surrealismo el poeta Alejandro Rejón va a la siga de esa identidad de las imágenes que tanto proclamara el poeta Frances Robert Desnos, diríamos que en este caso es análoga la identidad en las imágenes de Alejandro Rejón Huchin.
«Un beso abierto en el centro de la noche
Que es la luna tocada
Por la identidad de una imagen».
A medida que avanzamos en la lectura de estos breves textos, constatamos un eficaz ensamble de imaginación y percepción (no obstante, la supremacía de la imaginación sobre la percepción), que entrega resultados admirables, unida muchas veces a una síntesis intuitiva. La poesía de Alejandro Rejón Huchin tiene la gran virtud de lograr que las metáforas muestren y pongan en un juego gravitatorio una imagen, y a la vez se potencie en toda su dimensión visual a la metáfora misma, sin abandonar el mensaje de misterio, muerte, deseo, permanencia, disolución, que cada una de ellas conlleva.
Relámpago de sed (50 páginas) de Alejandro Rejón Huchin (México) (Andesgraund Ediciones, Colección Campos de hielo, abril de 2022).