Perder un hijo es uno de los dolores más grandes que puede vivir un ser humano, y en este libro Paula Assler comparte esta experiencia, la que estuvo precedida por una terapia de años en la trabajó este y otros duelos previos, que también narra en este libro. Esa terapia y la reconciliación con sus antiguos dolores la preparó, según sus propias palabras, para poder vivir la perdida de sus dos hijas en un trágico accidente. Paula nos habla de su proceso y su testimonio nos interpela. ¿Podemos prepararnos para una tragedia radical? Un libro esperanzador, con un mensaje que llega al corazón.
El 18 de enero se cumplen seis años del brutal accidente que les costó la vida a dos de sus hijas en una playa en Perú. Un viaje familiar con hijas, hijos y nietos que terminó de la peor manera que cualquier persona pueda imaginar. Paula Assler decidió escribir este libro como un homenaje y también para compartir su experiencia de seguir viviendo.
«Todos, alguna vez, nos hemos preguntado si seríamos capaces de sobrevivir a un dolor tan brutal. En el libro Si digo muerte, digo vida de Paula Assler, podemos entender de manera muy clara qué es lo que nos protege a la hora de experimentar esta desgarradora experiencia. La autora revive y relata con total transparencia el desgarro de una madre que pierde a dos hijas y su fortaleza para afrontarlo. Es a demostración de que la fortaleza se gesta no cuando sucede la tragedia, sino mucho antes: en el entrenamiento previo de esta capacidad de sobreponernos a las pérdidas», dice Valentina Capponi, médico psiquiatra, en el prólogo del libro.
En la primera parte del libro, Paula nos relata su vida, desde su infancia hasta la adultez, a partir de su mirada actual, luego de haber vivido experiencias potentes y marcadoras. En una segunda parte, narra el duelo más doloroso que le tocó vivir, el que podemos comprender a partir de la elaboración que hizo de sus anteriores pérdidas. Con ese aprendizaje a cuestas, la autora da testimonio sobre su preparación interior para poder enfrentar, sobreponerse, seguir adelante y vivir apasionadamente.
«Este testimonio demuestra que la fortaleza se gesta no cuando sucede la tragedia, sino mucho antes: en el entrenamiento previo de esta capacidad de sobreponernos a las pérdidas» escribió Ricardo Capponi, su médico psiquiatra, antes de morir.
«Si uno en la vida no tiene pena, creo que uno no se desarrolla como ser humano. He aprendido que uno puede tener paz en el dolor, porque la paz la haces tú. La paz la hace uno, vive dentro de uno. Yo a la pena la abrazo, es parte mía. Y la alegría es la otra cara de la pena. Abrazo a ambas, porque para mí, eso es vivir. Han transcurrido varios años y algo he entendido: la pena ha sido mi maestra. Siempre va a ser parte de mi vida. Igual que la alegría. Al final, se trata de vivir, vivir y vivir», reflexiona Paula.
Todo lo que recaude la venta del libro será donado al Movimiento Positivo de la Muerte.
Paula Assler Alemparte (1956, Viña del Mar) estudió dibujo técnico en la Universidad Técnica del Estado, hoy Universidad de Santiago. Sus intereses artísticos son múltiples, la pintura, la cerámica y la música. Asidua lectora, formó parte del taller de escritura de Carola Rivas durante varios años. Este, su primer libro, narra la historia de su vida.